James Allen nos presenta en este pequeño, pero importante ensayo, una reflexión:
“El hombre es literalmente lo que piensa, siendo su carácter la suma de todos sus pensamientos”. Por lo tanto, los pensamientos negativos, como la ira, el miedo y la autocompasión, conducen a situaciones adversas y a una vida desdichada. En contraste, los pensamientos positivos, como el amor, la compasión y la felicidad, resultan en una vida de éxito y bienestar.
Como el hombre piensa, así es él, es una profunda reflexión sobre el poder del pensamiento en la formación del carácter, las circunstancias y el destino de una persona. Allen presenta un mensaje de empoderamiento personal, alentando a los lectores a tomar control de sus pensamientos para crear una vida de éxito, felicidad y bienestar. 
La enseñanza de Allen ha perdurado en el tiempo debido a su claridad y universalidad, inspirando a generaciones a adoptar una mentalidad positiva y proactiva.