Hambre, pobreza, una pensión miserable de la calle Hortaleza, misteriosas amenazas de muerte en el sucio espejo de un baño derruido, una mujer célebre del café Gijón, Francisco Umbral, sus libros, su obra, su pensamiento… ¿qué más necesita un joven para alcanzar al artista que lleva dentro? Samuel Lamata ha llegado a Madrid para dedicarse solo a escribir, para triunfar en la literatura, pero en especial para espiar a Umbral y para hacer de esta ciudad un personaje literario. En la miserable pensión de la calle Hortaleza en la que vive, antes de acostarse se repite a menudo dos frases de Witold Grombrowicz. La primera: “Yo no era nada, por lo tanto podía permitírmelo todo”. La segunda: “Desde que ejerzo la literatura siempre he tenido que destruir a alguien para salvarme a mí mismo”. Así empieza su trepidante búsqueda, literaria, vital, en donde él como narrador con un amplio registro literario (Borges, Kafka, Gómez de la Serna, etc.) trata de encontrar al verdadero Francisco Umbral, descubrir quién se esconde tras el personaje de Maruja Lapoint (pseudónimo correspondiente a cierta bohemia todavía viva, meretriz célebre del Café Gijón) y, por último, intentar descifrar su propia identidad.
UNA PUTA ALBINA COLGADA DEL BRAZO DE FRANCISCO UMBRAL
AUTOR
Diego MedranoEDITORIAL
NowtilusISBN
9788497635196
PÁGINAS / MEDIDA
192 / 16 x 23.5 cm
TEMÁTICA
Novelas y best sellers
COLECCIÓN
Narrativa